La Catedral
La Catedral de San Vicente es el principal orgullo de Roda de Isábena y está considerada una de las grandes realizaciones de la época en el norte del Altoaragón.
Consagrada por primera vez por el obispo Odisendo en diciembre del 956, el templo original se construyó sobre los restos de un antiguo castillo dentro del recinto amurallado debido a la cercana presencia árabe. A comienzos del segundo milenio, Abd-al-Malik, hijo de Almanzor, devastó toda Ribagorza, incluyendo Roda de Isábena y su catedral, que fue reconstruida entre 1017 y 1030.
El trabajo de restauración lo iniciaron constructores lombardos que luego fueron sustituidos por otros de origen navarro en tiempos de Sancho el Mayor. En el trascurso de los siglos posteriores se unieron al complejo catedralicio otras dependencias hasta constituir un conjunto arquitectónico formado por la propia catedral -con su claustro, pórtico, torre y aposentos contiguos de sala capitular, capilla de San Agustín, refectorio- palacio prioral y restos de la vieja torre defensiva.
La basílica se asienta sobre una plataforma rocosa que desbordan por ambos extremos los apéndices catedralicios del coro y las criptas, destacando los ábsides lombardos, la portada -siglos XII-XIII- con capiteles historiados, el pórtico, la torre del siglo XVIII, las criptas -especialmente la de San Ramón- y un precioso órgano de 1653 todavía en uso, obra del organero fray Martín Peruga.
Las obras de restauración fueron posibles gracias a la intervención del ministerio de cultura y al trabajo del arquitecto Pons Sorolla que también intervino en otros proyectos como la plaza que se encuentra junto a la Catedral. Pero sobretodo, la recuperación de la catedral y del conjunto de la localidad, así como de numerosas ermitas de toda la zona, se debe al tesón, trabajo y espíritu del sacerdote José María Lemyñana, párroco de Roda de Isábena que falleció en 2009, quien supo simultanear su tarea espiritual, al extremo que hay quien le ha calificado de último "obispo" de Roda, con la recuperación del patrimonio oscense y la dinamización de Roda de Isábena.
--